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Breve Reporte Aventurero

Estoy en Nazca. Hace calor y el cansancio apenas si me permite escribir estas palabras. He caminado durante tres días desde Pampa Galeras hasta la Mina del Inca (Ayacucho). Mañana iré a la bahía de San Fernando, en Marcona (Ica), donde terminará el sorprendente periplo.

Tengo tanto que decir, hay tanto por contar y describir, tanto personajes por citar, gente de corazón abierto que nos brindo su hogar para pasar la noche, que compartió con nosotros lo poco que tiene: un puñado de mote, unas papitas sancochadas, un caldito caluroso y reponedor.

Las imágenes están claras en mi mente y confieso que mis ojos se humedecen al recordarlo y es que el Perú nunca deja de sorprenderme, de enternercerme con el gesto afable y desprendido de sus hijos, mis hermanos, quienes siempre tienen algo que ofrecer: una sonrisa, una palabra de apoyo, un gesto de aliento...

Ese es el Perú que conmueve, el Perú que te llena de esperanza, el Perú que queremos descubrir en cada uno de nuestros pasos...Tengo que marcharme. Me gana el sueño y me abruma el calor.

La noche será corta, a las 6 partiré a San Fernando para encontrarme con el mar y, si tengo suerte, con los cóndores y guanacos que descienden de los Andes para buscar refugio en este pedacito del Pacífico.

*Explorando Perú agradece a Job Rosales Pacheco de Marcona Adventure, por habernos invitado a vivir esta aventura, en compañía de Felipe Varela Travesí, el Chasqui de la Paz.

Comentarios

Anónimo dijo…
Los viajes por nuestro país no sólo permiten apreciar sus bellos y sorprendentes paisajes, sino también maravillarnos de la generosidad y desprendimiento de las personas, que a veces tienen con la justa para ellos. Son estos actos, los que alimentan nuestra fe en el país y claro, en nosotros mismos.

Cómo ves, tus textos siempre me conmueven. Te esperamos amigo.
Ya estoy de vuelta. Cansado pero lleno de vitalidad. Las experiencias de los caminos alimentan el alma y sirven para entender cada vez más al país.

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