Soy quién quise ser o soy lo que la vida quiso que fuera. Soy consecuencia y certeza o soy el fruto del azar... la bolita lanzada por un crupier perverso y todopoderoso.
Tal vez soy un poco de todo. Una mezcla de esto y de aquello. Soy inga y mandinga. Llano y altura, valle y montaña. Soy mestizo –o al menos eso creo- en un país de mil razas, en un país milenario, en un país aún fraccionado.
Qué fui, qué soy, qué seré. Fui sanmarquino, como fui “diegoferrino” y de la 1100 y hasta una vez fui “rabanito” en el jardín Perú, donde una niña –ay qué atrevida, ay que descarada- me lanzó un piropo, el primero -¿el último?- que recibí en mi vida.
Eso es pasado. Ahora soy un ciudadano gris en una nación de contrastes, en un mundo desastroso. Soy de los que votan en blanco, de los que viajan en combi, de los que dudan de Dios, de los que aman la paz pero conviven con la violencia.
Soy hijo, hermano, tío, amigo y enemigo. Soy lector de textos que no escribo, admirador de fotos que no hago. Soy futbolero persistente, iluso, matemático. Soy jefe y esclavo. Soy periodista. Soy viajero. Soy arribo y partida. Soy adiós y bienvenida.
A veces soy bar y tertulia: sonrisa fugaz, baile sin ritmo, soledad acompañada.
A veces soy nostalgia: versos sin musas, amores perdidos, amores que no aparecen.
A veces soy rebeldía: ceño fruncido, puño cerrado, enjundia y enojo.
Soy luz y sombra, acierto y error, felicidad y tristeza, sosiego e inquietud. Soy de aquí y de allá y, quizás por eso, hoy me pregunto –les pregunto- quién soy o qué soy.
Comentarios
Adelante, viajero!
Flor del Mar
r.v.ch.
olvidaste poner Y CUÑADO TAMBIEN...buuu
Saludos,
r.v.ch.